Buscar este blog

viernes, 23 de marzo de 2007

LISBON, REVISITED 1935

El sol de este medio día de enero resalta en las tejas de las casas y en el río. La ciudad, hoy domingo, es mas Lisboa que nunca. El Castello de San Jorge domina las construcciones vecinas. Desde el Senhora do Monte la ciudad desconoce la presencia del invierno.
El morador de la Rua Coelho da Rocha 16, tiene otra visión de este día. Por otra parte se siente gris, cansado, y solitario. Las prolongadas vigilias de las ultimas noches, muestran a sus enrojecidos ojos una ciudad, su querida ciudad, maltrecha y abandonada.
Desde que murió la tía, vive solo en la casa. Sus continuos cambios de pensión han cesado. Pero su interior sigue en continuo movimiento y mudanza.
Este domingo, como otros es largo y monótono, salvo alguna lectura, es de nunca acabar. Ya sin cigarrillos, se asoma a la ventana. Ve la calle desierta. La encargada del edificio ha salido a visitar a sus parientes. A la noche le traerá higos. Desde su observatorio comprueba que no abrió la tabaquería. El almacén lindero con el anexo de despacho de bebidas también cerrado. Alves ha fallado. . El vecino de la 16 siente que su angustia aumenta. . Una tarde sin alcohol y sin cigarros. La Brasileira, como todos los domingos, no es un buen lugar para él. Sus compañeros de tertulias fingen los fines de semana sus obligaciones familiares: se convierten en buenos padres de familia, esposos, tíos y hermanos amantes. Pero el solo observa la desolada calle desde la ventana. Siente su propio invierno. Otro domingo sin tertulias, cigarros y grapa.
Desde su puesto de observación sigue el movimiento de la puerta del Hospital Británico, el busto de Wellington, en la plazoleta cubre su visión. Su médico en él ultima reconocimiento, comparó el hígado de su enfermo con el granito de la estatua de Wellington: duro y seco. Esto se acaba, no se encontraba ya solución. El abandono, el alcohol, las noches sin sueño son el resultado. Ahora en su casa solo, sin tertulias, siente mayor su situación y se ahonda en lo que él siente su fracaso de vida. .
Esa mañana Al medio día lo sacó de ese pozo, la carta que le contestó a Monteiro. Frente al Hospital alguna gente espera el eléctrico para ir a los “Los Placeres”. Por ahora noi quiere piensar en ese lugar tan lugar, sabe que estará tal vez sin darse cuenta estará allí en el próximo invierno.
Esa mañana, ha podido terminar la carta a Casáis Monteiro. Hace quince días que la tieneia sobre el escritorio., pero no se deicida. Hoy no tuvo enia papel apropiado para esa respuesta. Pero sé resistió depara usar esoe como pretexto para no escribirle. Prefirió ocuparse de ella aún en papel ordinario. No soportaba mas la Mientras aporrea la Royal apoyada en el alto escritorio, , sobre el alto escritorio, escribe de pie. , vVuelve a sentirse mejorbien. Parece que pPuede volver a escribir y a concluir una simple carta . Hace mucho que no sonríe. objetivo simple como eso de terminar una carta, Escribir en su elevado escritorio una costumbre de largos años. En lo de el Bar de Fonseca, junto a la en soledad de la barra, extrañaba su máquina. Es cuando apresura su trago y regreso a casa. Allí pasara en limpio sus muchas servilletas y papeles que inundan sus bolsillos. Apresuraba su regreso a casa para pasar en limpio lo que había anotado en tantas servilletas y papeles que llevaba en sus bolsillos. La carta a Monteiro significa mucho para él. . Le explica en ella porque escribeía y cuales eran sus planes para ese año. Sabeia que tal vez esa carta seráia lo mas ordenado ultimo coherente que escribirá ese último año. Quisiera ería sin embargo concluir algunos versos que tiene en enia todavía en servilletas de papel. Había vuelto a escribir en ingles. Pero la carta a Monteiro lo entusiasmaba porque como aquellos otros versos de 1915 la escribió de un solo tirón. Para su buena administración le piedeía a Monteiro que le aviseara lo antes posible si la había recibeido. Esra demasiado puntilloso en cuestiones de contabilidad y administración. Ser traductor en firmas comerciales le habían dado un giro especial a su estilo en esas traducciones, y lo usaba en su correspondencia privada. . Preparaó el sobre, lo pone dejó jujunto a su chaqueta para no olvidar de despachar la carta al otro día. Su única chaqueta buena, necesitaba que se le cosa un iera uno o dos botóones. Su orgulloso ingles perramus, El gris y brilloso por el uso, perramus ingles, creia le cubreía estas carencias. os problemas. Su La cchaqueta no soportaba más zurcidos, como todo él. estaba acabada como su hígado y él..
Las cosas son han sido duras este ultimo año. Si pudiera tener una entrada regular, puede que se arregleía., y Sseguir escribiendo como hoy, que gloria seguro que ordenará algunos de sus papeles para una publicacion decente.para publicarse sus papeles. Al pasar Sin motivo aparente enciende endió el viejo receptor de radio, el tesoro de su tía. Cómo es que no lo vendió todavía?. que adoraba su tía. Se escuchaban canciones inglesas. El inglés es nuevamente su ra su idioma. Desde Dubran Siempre quiso ser un poeta inglés. Esta ahora escribiendo algunos versos en ese idioma. Pero ahora sabe que es solo un ignorado poeta portugués. La canción diceecía algo como:
NO MATTER WHAT THE FUTURE BRINGS, AS TIME GOES BY...

Que traerá el mañana. ,V vuelven entonces sus angustias. Se encierra en sus propios versos, y finge tan completamente; que hasta finge que es dolor; el dolor que en verdad siente. No puede fingir más, aunque esa era su especialidad. Nadie se interesará nunca por los papeles que contienen tiene en los doslos arcones debajo del alto escritorio. Mientras escribe en la Royal, es su costumbre reposar un reposa un pie sobre uno de los baúles. Tantas Muchas veces no sabe si estáa en casa o en lo de Fonseca. Nadie se interesará en sus escritos. Pero qué importa si siempre se negó a publicar. Ya paso su tiempo. Con el dinero que le dejó su tía publicó un libro y siente que se apresuró en llevarlo a concurso. Se lo ha dicho a Monteiro. No era oportuno. Por necesidad, o más aun porque lo empujaron a ello, ha publicado un libro el año pasado. Gastó el poco dinero que le dejó su tía. Porqué lo publicó y presentó a concurso, habrá pensado que podría conseguir ese puesto en la Biblioteca: segundo premio y mención especial.
AS TIME GOES BY
En la cocina, rompe unos con huevos para prepararse se prepara un omelette de con hierbas finas. De la casi vacía botella de vino., Se sirve una copa del ultimo vino disponible en la casa. Qué pasa si Avila no viene. No tiene de beber ni de fumar. Desde la ventana de la cocina confirma la ausencia del tendero. Poeta tTendrás versos secos y sin humos. Irá a la Brasileira. Seguro que algún mozo le dará un pitillo. Comeiendo su omellete y se dice en su profunda angustia como siempre pensó en inglés y se dijo:

I KNOW NOT WHAT THE FUTURE WILL BRING
Pasan ron unos meses y el poeta, ya postrado en una cama del Hospital San Luis de los Franceses, espera el final. desenlace. Pide entonces papel y lápiz y escribe esta nota, que todavía hoy se conserva. Vaya a saber Qqué lo llegvó en esos momentos de noviembre aa sus pensamientos de aquel domingo enero, gris sin cigarros y vino:. Sus agitadas manos escribieron entonces, él ultimo de sus versos
I KNOW NOT WHAT THE FUTURE WILL BRING


LUIS B.NUÑEZ
22 de Abril de 2001

HE SOÑADO MUCHO

“”He soñado mucho. Estoy cansado de haber soñado, pero no cansado de soñar. De soñar nadie se cansa, porque soñar es olvidar, y olvidar no pesa y es un sueño sin sueños en el que estamos despiertos. En sueños lo he conseguido todo. También he despertado, ¿pero que importa?. ¡Cuantos Cesares he sido!. ¡Cuantos Césares he sido y sueño todavía ser!. Cuantos Césares he sido, pero no de los reales. He sido verdaderamente imperial mientras he soñado, y por esos nunca he sido nada. Mis ejércitos fueron derrotados, pero la derrota fue blanda, y nadie murió. Cuantos Césares he sido, aquí mismo, en el Hospital San Luis, en estos últimos tres días. Y lo Césares que he sido todavía viven en mi imaginación; pero los Césares que han sido están muertos, y el Hospital San Luis, es decir la realidad, no puede conocerlos. Pero no sé ahora que traerá el día de mañana, quisiera terminar esto. ¿Pero que ocurre? ¿He perdido las gafas? , ¡Por favor los gafas, las gafas, no puedo ver, ... ¡ por favor alguien debe seguir esto ...!
Todos nosotros los otros y yo mismo

SE ARMA UNA ANTOLOGIA

Fecha de creación 30/01/98 05:28 98.1.P.1.

Algunos textos

de

Luis Bautista Nuñez



1. PATIO DE TIERRA Octubre 18 1996


2. BYE BYE ILSA LASLO -DE CASABLANCA A LISBOA LUEGO PARIS. Enero 3 de 1997


3. CAJAS AMONTONADAS. febrero 21 1997


4. LA SOMBRA Y SU PORTAFOLIO enero 12 de 1997

5. LA LLEGADA julio 29 1997



viernes 30 de enero de 1998

PASOS PARA LA RECUPERACION DEL MITO DE CARLOS GARDEL

Breve descripción de los pasos que hacen recuperar en uno el mito de Carlos Romualdo Gardel.
Pensamientos al estar sentado en el sillon donde Bill Wilson escribio los 12 pasos de recuperacion de AA
era un sillon Gicovate, Bill tuvo un serio accidente pues el sillon se cerro automaticamente y quedo encerrado 36 años, despues pudo ser abierto y alli estaba Cariatides igualito a Carlos Romualdo Gardel cuando bajo del avión en Medellin.
El descubrimiento de Cariatides y sus escritos operó el 24 de enero de 1971
Cariatides era uno de los heteronimios de Bill Wilson, que a su vez era heteronimio de ............, bueno esa es otra historia.
Bill a traves de Cariatides estuvo 36 años de sobriedad al carbón.
Yo estuve sentado alli, el sillon volvio a cerrarse, pude escapar dada mis dotes de escapista, ......
bueno basta de pavadas estos son los pasos.... solo la gente que esta muy bien no los puede hacer,

1. que le vas a hacer?

El incendio siempre es el incendio.
Mi vida esta totalmente carbonizada
Yo no puedo,

2. la vida es así.
Solo Cariatides podrá hacerme entender esto de 1.
El puede,

3. Me dedico a la garufa
Debo entregar mi vida, mi voluntad y si también mi cartera y portafolios a Cariatides
Se lo dejo todo a el.

4. ahora tengo otro querer

Hago una lista de mis recuerdos, sobre todo los que no se encuentran carbonizados, y preparo la base de lo que puede ser el Morocho del Abasto.
Ammacord

5. Yo me quiero divertir
No debo hablar de esto con nadie, salvo con Cariatides
Silencio absoluto

6. con la rubia, con la morena
Estoy dispuesto a ser Carlos Romualdo Gardel, y bancarme todas las consecuencias.
Estoy dispuesto a ser el mejor

7. con Mimi con Colombina, con cualquiera
Levanto el pie izquierdo a la altura del banquito, y tomando la guitarra, haciendo los ademanes -no se me tiene que ocurrir hacerla sonar -- le ruego y le pido a Cariatides que me deje ser Carlos Romualdo Gardel
Estoy orgulloso de ser esto (?)}

8. Esta noche es de verbena
Hago una lista de todas las películas de Gardel que vi -deben ser todas-, y me dispongo a comprarlas o a robarlas del vídeo club de la otra cuadra y estoy dispuesto a verlas todas de nuevo, pero durante 90 días.., todo los días.
Las perdidas se debitan las ganancias se acreditan

9. Esta noche es carnaval
Salgo a hacer lo de 8.
El que rompe paga, toca a mi toca a su hermana

10. La guitarra en el ropero
Cada día canto mejor.
Nos pasamos el dia diciendo y haciendo pavadas.

11. todavía esta colgada
debo hablar de esto solo con Cariatides, debo conservar esto como un amor secreto.
Vida espiritual en absoluto secreto, esto y mucho mas mejor que no lo sepa nadie

12. ya no nos importa que se rían, y que nos llamen los mareados.
Llevamos la pinta carbonizada del Cantor de Buenos Aires, a cuestas,
Cuesta Abajo.
Proxima estacion Medellin, preparen los pañuelos y los paracaidas

12 bis. Escucha la barra agradecida.........Salute
sentí la barra agradecida.....la carne se quema a los F 653 grados, solamente de tratarse de un lomo como el del mito o como soy yo, el Bronce que sonríe. el bronce se quema a los F 1031 grados .
Medellin

martes 30 de abril de 1996
ABR30.TXT
363
Posted by Picasa

y esta muchacha como aparecio aqui?

monica bulecchi
Posted by Picasa

QUEDA AHORA SOLO EL CANASTO DE PANADERIA

Queda ahora solo el canasto de panadería. Un plástico transparente cubre su contenido. Allí estaba su ropa. Descorre el plástico y arriba su sobretodo alguna vez negro sobresale en su grosura. En uno de sus bolsillos que revisa encuentra un sobre con una carta. Tiene ganas de arrojarla en la doce/doce de reciclaje que está en un rincón, pero se detiene y la guarda dentro de su pantalón.
Su sobretodo en correspondencia y simetría con su mente arma una conjura que lo acerca a una música popular sobre un tapado de armiño: “El tapado lo estoy pagando y el amor ya se acabó”. La mujer que no está. La que se fue. La que no volverá. La que dejó ir. Lo que no fue. ¿Renunciamiento?. ¡Que cagón que habia sido!. Siempre habia sido muy cagón.
Sus retorcijones de estomago le recuerdan lo cagón que es. Los retorcijones olvidados y en postergación durante toda la mudanza, ahora lo movilizan. Sudoroso, afiebrado, pero ya demasiado tarde, corre hacia el baño. Llegaron las lluvias también las diarreas
Un calmo y amoroso fuego hace desaparecer sus malestares, siente la libertad en esa suciedad, en esa inmundicia. El alivio vuelve a su cuerpo y su alma
Mierda.
Sus pantalones recibieron de sus chorreadas piernas un calor suave, tierno y putrefacto.
Pura mierda.
Entra en la bañera y deja correr agua caliente sobre su sucio cuerpo, es como un festejo de inauguración, el happy hour del nuevo lugar.
Del bolsillo del pantalón con caca saca el sobre, bajo la ducha lo abre y lee, es su propia carta, la que se envío a si mismo desde París. Nunca la habia puesto en el buzón.
La habia escrito, no la había imaginado.
¡Eureka!.
Era para salir a gritarlo por el palier.
Ríe bajo la ducha, con ganas, como hace tiempo no lo hace.
Pero en plena cochinada, suena el timbre de calle.

Martes 30 de Marzo de 1999
C:\Mis documentos\queda ahora solo el canasto de panaderia.doc
. Un plástico transparente cubre su contenido. Allí estaba su ropa. Descorre el plástico y arriba su sobretodo alguna vez negro sobresale en su grosura. En uno de sus bolsillos que revisa encuentra un sobre con una carta. Tiene ganas de arrojarla en la doce/doce de reciclaje que está en un rincón, pero se detiene y la guarda dentro de su pantalón.
Su sobretodo en correspondencia y simetría con su mente arma una conjura que lo acerca a una música popular sobre un tapado de armiño: “El tapado lo estoy pagando y el amor ya se acabó”. La mujer que no está. La que se fue. La que no volverá. La que dejó ir. Lo que no fue. ¿Renunciamiento?. ¡Que cagón que habia sido!. Siempre habia sido muy cagón.
Sus retorcijones de estomago le recuerdan lo cagón que es. Los retorcijones olvidados y en postergación durante toda la mudanza, ahora lo movilizan. Sudoroso, afiebrado, pero ya demasiado tarde, corre hacia el baño. Llegaron las lluvias también las diarreas
Un calmo y amoroso fuego hace desaparecer sus malestares, siente la libertad en esa suciedad, en esa inmundicia. El alivio vuelve a su cuerpo y su alma
Mierda.
Sus pantalones recibieron de sus chorreadas piernas un calor suave, tierno y putrefacto.
Pura mierda.
Entra en la bañera y deja correr agua caliente sobre su sucio cuerpo, es como un festejo de inauguración, el happy hour del nuevo lugar.
Del bolsillo del pantalón con caca saca el sobre, bajo la ducha lo abre y lee, es su propia carta, la que se envío a si mismo desde París. Nunca la habia puesto en el buzón.
La habia escrito, no la había imaginado.
¡Eureka!.
Era para salir a gritarlo por el palier.
Ríe bajo la ducha, con ganas, como hace tiempo no lo hace.
Pero en plena cochinada, suena el timbre de calle.

Martes 30 de Marzo de 1999
C:\Mis documentos\queda ahora solo el canasto de panaderia.doc
Un plástico transparente cubre su contenido. Allí estaba su ropa. Descorre el plástico y arriba su sobretodo alguna vez negro sobresale en su grosura. En uno de sus bolsillos que revisa encuentra un sobre con una carta. Tiene ganas de arrojarla en la doce/doce de reciclaje que está en un rincón, pero se detiene y la guarda dentro de su pantalón.
Su sobretodo en correspondencia y simetría con su mente arma una conjura que lo acerca a una música popular sobre un tapado de armiño: “El tapado lo estoy pagando y el amor ya se acabó”. La mujer que no está. La que se fue. La que no volverá. La que dejó ir. Lo que no fue. ¿Renunciamiento?. ¡Que cagón que habia sido!. Siempre habia sido muy cagón.
Sus retorcijones de estomago le recuerdan lo cagón que es. Los retorcijones olvidados y en postergación durante toda la mudanza, ahora lo movilizan. Sudoroso, afiebrado, pero ya demasiado tarde, corre hacia el baño. Llegaron las lluvias también las diarreas
Un calmo y amoroso fuego hace desaparecer sus malestares, siente la libertad en esa suciedad, en esa inmundicia. El alivio vuelve a su cuerpo y su alma
Mierda.
Sus pantalones recibieron de sus chorreadas piernas un calor suave, tierno y putrefacto.
Pura mierda.
Entra en la bañera y deja correr agua caliente sobre su sucio cuerpo, es como un festejo de inauguración, el happy hour del nuevo lugar.
Del bolsillo del pantalón con caca saca el sobre, bajo la ducha lo abre y lee, es su propia carta, la que se envío a si mismo desde París. Nunca la habia puesto en el buzón.
La habia escrito, no la había imaginado.
¡Eureka!.
Era para salir a gritarlo por el palier.
Ríe bajo la ducha, con ganas, como hace tiempo no lo hace.
Pero en plena cochinada, suena el timbre de calle.

Martes 30 de Marzo de 1999
C:\Mis documentos\queda ahora solo el canasto de panaderia.doc

PAUL AUSTER, que capo soy!

Posted by Picasa

FRED ASTAIRE & ELEONOR POWER

Posted by Picasa

LATIN AMERICAN MSS.--ARGENTINA

LATIN AMERICAN MSS.--ARGENTINA: "Lemos"

biografia en un dia de censo.

Ideas sobre una biografía.

Nací el 30 de Noviembre de 1935 en Lisboa.
Mi madre era portera de un edificio, nuevo por aquellos tiempos.
Papá era conductor de tranvías.
Mis otros hermanos son mayores que yo son de un matrimonio anterior de papa. Eran tres, hoy solo vive uno en Los Angeles California.

En 1942 emigramos hacia la Argentina y vivo en esta Ciudad desde entonces.
Papa siguió con su oficio y mama continua como portera en una casa casi igual a la de Lisboa.

Trabajo de traductor e interprete pues hablo y escribo distintos idiomas.
El colegio donde trabajaba ha cerrado.
La empresa donde algunas veces requerían mis servicios también ha cerrado
No se lo que espero, tal vez cerrar yo también.
Hoy día no tengo gran trabajo.

Prácticamente vivo con lo que me pasan mis hijos.

Aquí alquilo
Vivo solo.
No me gustan los animales
Algunas gentes tampoco.
Prefiero estar solo.
De momento puedo caminar.

Casi podría decirse que soy un anciano desocupado.
De mi matrimonio prefería no hablar
De mis estudios también.
Solo quisiera que terminara este censo.
Hoy me encuentro vació.
Todo lo veo vació.

Hoy y mañana no puedo ir a ningún café a mirar pasar a las gentes.
No me agrada sentarme en los parques.

Preferiría no cooperar en este censo.
Creo que los censos son peligrosos.
Hace 2002 años el movimiento religioso mas movilizados que yo he vivido se empezó a gestar en un censo.
Un carpintero y su mujer encinta viajaron a su lugar natal para que los romanos los censaran.
Tuvieron que ir a Belén.
Allí nació Jesús.
Allí quisiera estar ahora mismo yo y no aquí con UD Censor.
Censo
Censura
Todo aquello de los romanos, fue una jugada política, para que los judíos volvieran a Egipto.
A raíz de ese censo genero un gran movimiento.
Pero los judíos no eran tontos, ninguno regreso a Egipto.


Esporádicamente he tenido algunos ingresos por mis trabajos y escritos, los que me han permitido hacer algunos viajes.

Quiero volver a Lisboa, tal vez a terminar mi historia.
O tal vez solo para comenzarla.

No tengo bienes, no tengo cuenta de banco.
Solo soy el que Uds. leen y ven ahora.
Esta es mi casa.
Esto es todo lo que yo tengo.

Ah también tengo una profunda tristeza.
En mi tierra a eso se llama saudade.
Aquí lo llamamos nostalgia.

También eso tengo
Buen día adiós.

Damasceno Monteiro.

Buenos Aires, 14 de Noviembre de 2001

abramos el cine

PRIMERA BOLA
Alguien olvidó las llaves. Ese pudo ser el comienzo de lo del Ronderos.
El maquinista del cine vecino le dice al del mostrador:
Don Francisco, tengo que pasar para abrir por el fondo.
Siempre lo mismo Raúl, que Fermín que López, que esto que aquello, ayer y hoy, nunca traen las llaves y claro te mandan a vos.
Sabe, los pibes están inquietos en la puerta. Mírelos atrás de la vidriera.
Bueno pasá, no me vengas con los pibes. Ojo Raúl con los escalones, ya sabes , acordate el otro día que fayutas son las chapas allá arriba. Ah! Andás de zapatillas, menos mal, pasa, pasa.
El maquinista va entre las mesas de billar del salón. Salvo la mesa central el resto esta en penumbras. Tres tipos junto a esa mesa están en un amague de apuesta y juego de manos, discuten entre sí. La lampara que ilumina la mesa, por los movimientos y forcejeos de los tres comienza a balancearse.
El Ernesto es uno de los tres. Al pasar el maquinista, se miran . Hay entre ellos una vieja y extraña rivalidad.
El Ernesto le dice a sus compañeros:
· Estos cosos del cine, cada día están mas boludos. El “zapatillas azules” va para el techo de nuevo. Todos los días se olvidan las llaves. Vamos, vamos, que voy a tirar la primera bola de la tarde. Dale zapatillas. Si no cuando bajes no estará mas el cine y te encontrarás con un estacionamiento. Vamos.
Raúl se mira las zapatillas, quisiera que no se vieran, le molestan en las puntas. Este guacho sigue con lo del estacionamiento.
Recuerda Raúl lo que le escuchó al hijo de Fermín con los de la otra cuadra. La oferta del Minimax, él prefiere esperar y usar el cine como playa de estacionamiento. Es un negocio que ya se fue, así dijo el hijo de Fermín. Claro ya se fue. Todo se vá, la Pirucha se fue. Ayer no mas agarró los pibes y rajó para lo de la vieja. Este año se fue dos veces. Creo que todo esta para la mierda. Vamos Raúl! Se dice a sí mismo mientras sube por la escalera colgante al techo. Mira para la mesa iluminada y el Ernesto. Ese puto no tiene problema. Siempre tiene para pasarse las tardes en este boliche. Con esos pensamientos Raúl sigue con su diaria rutina de abrir la matenee del cine desde el Ronderos.
Todo se acaba, el cine, la Pirucha, seguro que se fue con un atorrante como este. Sigue con sus pensamientos mientras ficha a Ernesto que se apresta para su primer tiro, le esta dando a la tiza y al talco.
El Raúl sigue enroscándose en sus pensamientos, Chau Pirucha. Otra vez sin laburo. Yo no sé hacer nada. Especialista en darle vuelta al proyector, enlatar las cintas y dárselas al de la moto, el estacionamiento, me pueden....
Ernesto, canchero como siempre, deja la tiza sobre el borde de la mesa, y entalca el taco. Se prepara está a punto de golpear, le llama la atención el polvo que rodea a la bola puntera, es del techo, o es la iluminación de esta mesa, piensa.
Cada vez el polvo que se junta es mayor, la vista fija en sus dedos ellos también empolvados?, retumban las chapas , caen sobre la mesa cascotes, ladrillos, polvo, vidrios, parte de la claraboya y casi toda la basura amontonada en el techo. Una gran montaña se forma en medio de la mesa, la lampara queda como bonete en la cima. Ya no se ve el tapete verde ni las bolas. Silencio, un gran silencio despues de la ecatombe. Donde estará el Raúl, que quilombo se armó, no?.
La montaña de escombros comienza a sacudirse, a temblar y a agrietarse, emergiendo de entre los restos del derrumbe la figura empolvada y payasesca de Raúl, sosteniendo en sus manos la bola blanca y la roja. Ernesto frente a Raúl de nuevo. El maquinista parado entre los escombros, va a hablar, pero el último cascote, le cae sobre su cabeza e interrumpe el discurso. Despierta y grita:
Vos y la Pirucha son unos hijos de puta.
Cae de culo sobre la mesa, suelta la bola roja, que hace una voltereta colosal entrando en la tronera. Mientras la zapatilla polvorienta cae a los pies del Ernesto , la mesa se desfonda finalmente.

Alguien olvidó las llaves. Ese pudo ser el comienzo de lo del Ronderos.
El maquinista del cine vecino le dice al del mostrador:
Don Francisco, tengo que pasar para abrir por el fondo.
Siempre lo mismo Raúl, que Fermín que López, que esto que aquello, ayer y hoy, nunca traen las llaves y claro te mandan a vos.
Sabe, los pibes están inquietos en la puerta. Mírelos atrás de la vidriera.
Bueno pasá, no me vengas con los pibes. Ojo Raúl con los escalones, ya sabes , acordate el otro día que fayutas son las chapas allá arriba. Ah! Andás de zapatillas, menos mal, pasa, pasa.
El maquinista va entre las mesas de billar del salón. Salvo la mesa central el resto esta en penumbras. Tres tipos junto a esa mesa están en un amague de apuesta y juego de manos, discuten entre sí. La lampara que ilumina la mesa, por los movimientos y forcejeos de los tres comienza a balancearse.
El Ernesto es uno de los tres. Al pasar el maquinista, se miran . Hay entre ellos una vieja y extraña rivalidad.
El Ernesto le dice a sus compañeros:
· Estos cosos del cine, cada día están mas boludos. El “zapatillas azules” va para el techo de nuevo. Todos los días se olvidan las llaves. Vamos, vamos, que voy a tirar la primera bola de la tarde. Dale zapatillas. Si no cuando bajes no estará mas el cine y te encontrarás con un estacionamiento. Vamos.
Raúl se mira las zapatillas, quisiera que no se vieran, le molestan en las puntas. Este guacho sigue con lo del estacionamiento.
Recuerda Raúl lo que le escuchó al hijo de Fermín con los de la otra cuadra. La oferta del Minimax, él prefiere esperar y usar el cine como playa de estacionamiento. Es un negocio que ya se fue, así dijo el hijo de Fermín. Claro ya se fue. Todo se vá, la Pirucha se fue. Ayer no mas agarró los pibes y rajó para lo de la vieja. Este año se fue dos veces. Creo que todo esta para la mierda. Vamos Raúl! Se dice a sí mismo mientras sube por la escalera colgante al techo. Mira para la mesa iluminada y el Ernesto. Ese puto no tiene problema. Siempre tiene para pasarse las tardes en este boliche. Con esos pensamientos Raúl sigue con su diaria rutina de abrir la matenee del cine desde el Ronderos.
Todo se acaba, el cine, la Pirucha, seguro que se fue con un atorrante como este. Sigue con sus pensamientos mientras ficha a Ernesto que se apresta para su primer tiro, le esta dando a la tiza y al talco.
El Raúl sigue enroscándose en sus pensamientos, Chau Pirucha. Otra vez sin laburo. Yo no sé hacer nada. Especialista en darle vuelta al proyector, enlatar las cintas y dárselas al de la moto, el estacionamiento, me pueden....
Ernesto, canchero como siempre, deja la tiza sobre el borde de la mesa, y entalca el taco. Se prepara está a punto de golpear, le llama la atención el polvo que rodea a la bola puntera, es del techo, o es la iluminación de esta mesa, piensa.
Cada vez el polvo que se junta es mayor, la vista fija en sus dedos ellos también empolvados?, retumban las chapas , caen sobre la mesa cascotes, ladrillos, polvo, vidrios, parte de la claraboya y casi toda la basura amontonada en el techo. Una gran montaña se forma en medio de la mesa, la lampara queda como bonete en la cima. Ya no se ve el tapete verde ni las bolas. Silencio, un gran silencio despues de la ecatombe. Donde estará el Raúl, que quilombo se armó, no?.
La montaña de escombros comienza a sacudirse, a temblar y a agrietarse, emergiendo de entre los restos del derrumbe la figura empolvada y payasesca de Raúl, sosteniendo en sus manos la bola blanca y la roja. Ernesto frente a Raúl de nuevo. El maquinista parado entre los escombros, va a hablar, pero el último cascote, le cae sobre su cabeza e interrumpe el discurso. Despierta y grita:
Vos y la Pirucha son unos hijos de puta.
Cae de culo sobre la mesa, suelta la bola roja, que hace una voltereta colosal entrando en la tronera. Mientras la zapatilla polvorienta cae a los pies del Ernesto , la mesa se desfonda finalmente.

mas del Sarrasani y tambien Houdini

Posted by Picasa

sarrasani en BERLIN 1930

http://www.wochenschau-archiv.de/kontrollklfenster.php?&PHPSESSID=&dmguid=08E92C0055BA58DF030103009D21A8C0D806000000&inf=209480&outf=273360&funktion=play250k#

pasion y muerte del circo

http://www.magicasruinas.com.ar/revistero/esto/revdesto233.htm

cuando llego el Sarrasani

http://letras-uruguay.espaciolatino.com/perazza/francisco/sarrasani.htm

CIRCO SARRASANI


1935. El Circo Sarrasani se instala en el predio de Retiro y convoca a una multitud de público

Foto: Gentileza Gustavo Bernstein

El 20 de julio de 1935, bajo una de las carpas de este circo nací. Mama era la muchacha del circo, que un día cansada la mano soltó.
Papá era el acomodador de este circo, que quedaba donde ahora esta el Diario La Nación.
Papá nunca pudo a pesar de su esfuerzo acomodarse en su vida. Pero se pasó la vida pasando programas, era un buen servidor.
El Cine Metropol, la piojera de Lavalle fue su destino final.
Yo seguí la carrera circense, hasta que entre como cadete en Harrods. Seguramente que el lector conoció al enanito que animaba desde las puertas de Florida a los paseantes a entrar en las Grandes Tiendas. Si, ese era yo


Fundido Final

El enano maldito (yo fui Chucky), ahora estoy en recuperación


El rey de la pantomima desapareció en el último incendio de la Baixa en Lisboa, durante la última actuación de Gran circo de LISBOA
Damasceno Monteirocontable, actor y payaso