Buscar este blog

domingo, 15 de julio de 2007

SOMBRAS

Es una de las tantas visiones diurnas de mi dormitorio. En las noches todo toma movimiento. Veo extraños cuerpos ondulantes que se apoderan de cada una de esas caras. Danzan con el guerrero de la lanza en cruz. Es un baile, extraño y ritual, durante una guerra total y final. El bosque que nos rodea es negro, a veces rojo.

Despierto en un grito, agitado y angustiado. La enfermera toma mis manos temblorosas, siento el sudor de mi espalda.

El liquido de la inyección penetra en los árboles que nos rodean. Las ramas vuelven a tomar el color de mis visiones diurnas.

Los cuerpos y caras estan nuevamente inmoviles, pero sus caras la veo triunfantes. El guerrero, se lo vé ahora rojo de sangre.

Yo señalo la pared, la enfermera me repite: es la humedad.
Pienso: es la cabeza del guerrero derrotado.

La enfermera, ahora con un enfermero me atan nuevamente a la cama.

A mis costados , las caras siguen inmoviles.
En el rincon, sobre una alfombra verde la cabeza degollada del guerrero derrotado.

172

..................

Luis Nuñez
TALLER 7.DOC
239

Al salir de Casablanca

Pero realmente, donde todo empezó lo sabría tiempo después fue en Colonia Vera.

Allí había llegado desde Lisboa, embarcado luego de una noche de borrachera.

En Vera conocí a Mateo el que hacia la limpieza en la Municipalidad, allí trabaje con el. Aquella tarde estábamos limpiando el patio, cuando nos llamo don Ignacio y nos dio dos fusiles, pues la policía se le había dado vuelta. Que hacia yo metido en ese lugar y en semejante problema.

Yo salía de un asunto con alemanes y ahora estaba metido en una guerra entre peronistas.

Mateo y Don Ignacio el intendente murieron aquella noche. Yo huí de Colonia Vera, lo hice en el avión que había participado en la defensa del edificio de la municipalidad. Yo siempre del lado perdedor. Su piloto había muerto también, yo me adueñe del avión.

Cuando volaba creí que llegaría a Lisboa pero llegue a Buenos Aires, luego me encontré en el Saint Michell en New York


Aunque creo que al salir de Casablanca
Página 1 de 1
Fecha de creación 10/07/98 05:19 98.7.P.7.

DICCIONARIO PERSONAL Y AUTOBIOGRAFICO

DICCIONARIO PERSONAL Y AUTOBIOGRAFICO

1 aulaga

Aula de un primer grado inferior, en Colegio Primario de la Avda America, Villa Pueyrredon, Buenos Aires, Republica Argentina..
Alli fué La Sta Mirta Garcia cumplió una suplencia de tres meses , en los años pequeños del autor de este Diccionario Autobiografico.

2 Daraptí
Afeccion coronaria de la tercera arteria, parte izquierda.
Se contagia de primos a primos.

3 Estelion
Lluvia de estrellas de colores, casi siempre sobre un fondo muy azul.
Suelen aparecer por ejemplos:
Al golpearse los dedos de la mano con un martillo.
O cuando se recibe un carteraso o trompis luego de decirle a una dama o a un caballero un buen zancajo.

4 Perianto
Afeccion coronaria de la segunda arteria, parte izquierda.
(Ver Darapti)
Se contagia entre los concurrentes a las manifestaciones de protestas en la Plaza del Congreso.

5 Ronzar
Dormir a cielo abierto en Zarate. Pcia de Buenos Aires, Republica Argentina.
6 Zancajo
Piropo, que los sudacas introdujeron en España.
Fue durante las invasiones de las ordas de argentinos llegadas por “ Finesterra.”
Producen algunos esteliones, casi todos con final felez.
Pueden decirse que son Made in Hollywood.

TEXTO
Luego de su primer y segundo Perianto y de su pre- Daraptí fue llevado a Zarate - su pueblo natal- donde le hicieron el Ronzar .

No les fue facil, alli llego otro darapti y este le salio bien y entonces final .
Unos instantes antes, sonreia a las enfermeras, a quienes les decia zancajos, pero en ningun caso se produjo ningun estelion.

Entre sueños e inyecciones varias transfusiones y se vio en su sillon de ruedas, muy parecido a su viejo ticiclo,
persiguiendo a la Sta Garcia, nuevamente en la Aulaga.

Esta chica Garcia salio corriendo para el patio, donde se interpuso el protector portero, que iba a hacer sonar la campana, para el segundo recreo.
El nunca escucho esa última campana.

Cuenta el pueblo que se vio pasar sobre los techos de Zarate, un enorme estelion como nunca se habia visto en todo aquel milenio.

Jueves 17 de abril de 1997